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jueves, 30 de septiembre de 2010

NPD 2010 en Londres

El próximo viernes día 1 de octubre tiene lugar en Londres el New Professional Day 2010. Una jornada organizada por el Career Development Group de CILIP y gratuita para todo el mundo (socios y no socios) dedicada a los estudiantes y nuevos profesionales para que conozcan un poco los entresijos de la profesión. Se tratan de una jornadas que se llevan celebrando desde hace cinco años y que esta vez cambian el formato.

En primer lugar, este año se celebrará no sólo en Londres, sino también, el 23 de noviembre, en Newcastle. El día se organiza con sesiones paralelas en las que jóvenes profesionales cuentan sus experiencias a los “más nuevos”, repitiéndose las sesiones por la mañana y por la tarde con la idea de que los asistentes puedan presenciar hasta cuatro sesiones paralelas o ir únicamente media jornada, evitando que pedir un día libre en el trabajo. Al mediodía tienen lugar las ponencias principales. Este año cuentan con Phil Bradley, una auténtica figura dentro de la biblioblogosfera británica y que se postula como candidato a la vice-presidencia de CILIP en 2011.

Entre los panelistas de las sesiones paralelas estaré yo con el tema “The Global Profession: the overseas perspective” donde iré comentando, a partir de mi propia experiencia profesional, distintos aspectos de la profesión en España: planes de estudio, asociacionismo o la dicotomía entre profesión e investigación.

Nuevamente agradecerle a Chris Rhodes, Ned Potter, Kathy Ennis y Maria Cotera su amable invitación.

lunes, 12 de julio de 2010

Con los nuevos profesionales ingleses

La semana pasada hice una escapada a Inglaterra para ver a la familia y aproveché para asistir a la New Professionals’ Conference 2010 celebrado en la Universidad de Sheffield. Ya asistí el año pasado como ponente y quería aprovechar para reunirme con alguna de la gente que conocí entonces y de paso conocer las inquietudes que tienen las nuevas generaciones de bibliotecarios en las islas.

El nivel de las ponencias (no sé si tengo esta percepción porque esta vez sí que pude realmente atender y no estuve bloqueado por los nervios) me pareció bastante más alto que el del año pasado, buenas presentaciones y muy buenas cualidades para desenvolverse ante el público (estamos hablando de gente que daba una ponencia por primera vez ante casi 100 personas). En cuanto a la temática, si el año pasado hubo mucho de tecnologías y dospuntocerismo, este año versó más sobre la autoformación y el desarrollo de nuevas destrezas y sobre la importancia de las relaciones sociales para desarrollarse profesionalmente.

Mi preferida fue la ponencia de Eleni Zazani, una bibliotecaria griega que, tras trabajar en la biblioteca de al Universidad de Atenas decidió marcharse a Londres y comenzar de cero ante la impotencia que sentía en Grecia al no poder evolucionar como profesional ante un ambiente asfixiante. No obstante, la ganadora este año (la empresa de trabajo Sue Hill Recruitment, especializada en bibliotecas, patrocina el evento y regala 150 libras y una botella de champán a la presentación mejor valorada por el público), Bronagh McCrudden, hizo una presentación excelente mostrando una visión muy acertada acerca de cómo sacarle partido a trabajos no remunerados en bibliotecas.

En lo referente a reencuentros, fue muy interesante ver cómo han evolucionado algunos de los ponentes del año pasado tras presentar una comunicación por primera vez. Entre ellos, destacan Ned Potter que organizó un taller sobre cómo sacarle partido a un blog, Sarah Jison y Jo Alcock (encargada de promover el tuiteo del evento, permítanme la expresión). Tres profesionales que junto a Chris Rhodes (uno de los organizadores del evento) se han implicado de una manera asombrosa en el activismo profesional siendo miembros de comisiones, dando charlas a nuevos profesionales, etc. Entre algunos de los proyectos en los que están enfrascados (imposible conocerlos todos) destaca la creación de una red independiente de bibliotecarios, LISNPN, cuyo objetivo es ofrecer recursos y ser un medio de cohesión entre futuros profesionales y nuevos profesionales. Están interesados en hacerla internacional, así que si alguien está interesado en participar no tiene que hacer más que ponerse en contacto conmigo.

Las presentaciones la subirán a la página web del Career Development Group de CILIP a lo largo de los próximos días. A continuación os dejo algunos enlaces sobre el evento:

miércoles, 21 de abril de 2010

III Jornadas sobre Salidas Profesionales para Titulados en Documentación

cartel_III_jornadas

La semana que viene, los días 28 y 29 de abril, celebramos desde la Facultad de Comunicación y Documentación las III Jornadas sobre Salidas Profesionales para Titulados en Documentación. Se trata de la tercera edición de unas jornadas que ya el año pasado tuvieron una gran acogida. Este año contamos también con ponentes muy interesantes que nos permitirán conocer mejor los entresijos de esta profesión.

Miércoles 28 de abril:

10.00 – Presentación por parte del decano de la Facultad, Antonio Ruiz Rodríguez

10.30 - ¿BUSCAS EMPLEO? MUÉVETE Yolanda de la Iglesia (Instituto Cervantes)

12.00 – Mesa redonda: DOCUMENTALISTAS AVENTUREROS Lucía Latorre(Archivalia), Laura Bonald (Swets Information Services BV) y Björn Jürgens (Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía IDEA)

17.00 – I+DOC: GESTORES DE I+D+i CON FORMACIÓN EN ByD Álvaro Roldán (Instituto de Salud Carlos III)

18.00 – Mesa redonda: LOS PROFESIONALES TOMAN LA PALABRA Anabel Fernández (Biblioteca Pública Provincial “Infanta Elena”), Laura Cerezo (Biblioteca de Andalucía) y Julián Marquina (RecBib – Recursos Bibliotecarios)


Miércoles 29 de abril:

10.00 – PLATAFORMA IBEA – BIBLIOTECAS ESCOLARES Ana Pérez (Facultad de Comunicación y Documentación de Granada)

10.30 – Taller de búsqueda de empleo a cargo del Centro de Promoción y Empleo y Prácticas de la Universidad de Granada

¡Os esperamos!

lunes, 5 de abril de 2010

Conferencia para nuevos profesionales: Demuestra tu valía

Hace un par de semanas salió al fin el programa de la New Professionals’ Conference 2010 organizada por el Career Development Group de CILIP. Segunda edición de este interesante encuentro de nuevos profesionales en el que tuve la suerte de participar el pasado año (por cierto, están disponibles todas las comunicaciones y presentaciones) y que supone una gran oportunidad para que jóvenes profesionales puedan conocerse, intercambiar ideas y saber un poco más acerca del entorno profesional en el que se moverán a lo largo de su carrera. Además, supone toda una experiencia para los ponentes que deben ser primerizos. El evento está patrocinado por la empresa Sue Hill Recruitment y, al final de la jornada, se votará a la mejor comunicación que será publicada en la revista Impact  (la revista del Career Development Group) y cuyo autor recibirá 100 libras y una botella de Sue Hill Fizz.

Este año, el evento se celebrará en la Universidad de Sheffield y el tema al que deberán responder los ponentes será Proving your worth in challenging times [Demuestra tu valía en tiempos difíciles]. Especialmente interesante me parece la presencia de bibliotecarios especializados en el ámbito del Derecho, como lo son Bronagh McCrudden (autora de una tesis sobre el estudio del comportamiento informativo de los abogados) y Laura Woods, que trabaja en un bufete de abogados, un ámbito totalmente desconocido para mí.

Por cierto, Ned Potter, el campeón de la edición del año pasado, y Chris Rhodes, uno de los organizadores, también anuncian en su blog el evento.

sábado, 6 de marzo de 2010

El bibliotecario “incrustado”

Durante las últimas semanas, en EC3 estamos recibiendo una serie de peticiones un tanto particulares que ponen en evidencia los drásticos cambios que están sufriendo las necesidades de los investigadores en el ámbito universitario. Básicamente consisten en profesores universitarios que necesitan a un documentalista que les ayude con la búsqueda de evidencias de calidad para la acreditación, aunque también hemos recibido alguna petición de asesoramiento completo de cara al desarrollo de la actividad investigadora.

Peticiones obviamente muy interesantes y que ponen de manifiesto aquello que ya anunció Daniel Torres sobre la aparición de un nuevo perfil profesional denominado en inglés embedded librarian, es decir, bibliotecario integrado o incrustado, cuya traducción parece más divertida (podéis ver sus presentaciones donde detalla en qué consisten las tares de este nuevo profesional). Un perfil muy interesante y que trae como novedad la integración del bibliotecario/documentalista en los grupos de investigación para ofrecer de este modo, un servicio completamente personalizado y ajustado a las necesidades específicas de los investigadores que lo integren.

Lo mejor (o peor, según se mire) es que son los propios usuarios los que están demandando a este tipo de profesionales y no los profesionales los que han ido transformando sus servicios hasta acabar adoptando este papel, ayer mismo un investigador me definía sin saberlo, las tareas que este nuevo profesional debe realizar, cuando me exponía el tipo de asesoramiento que quería: alguien que le asesore sobre cómo difundir sus trabajos, dónde publicarlos, que le gestione el CV, se encargue de que sus trabajos cumplan los requisitos de forma que requieren las publicaciones, le indique cuáles son los puntos débiles de su carrera investigadora y en los que debe incidir más, le avise cuando aparezcan convocatorias de su interés, etc.

La cuestión obvia que se deduce de todo esto es; ¿por qué no están realizando estas tareas las bibliotecas universitarias? En teoría esta labor les correspondería a ellas. De momento, intentaremos ir aprovechando ese vacío para cubrir este nuevo espacio de trabajo.

domingo, 21 de febrero de 2010

Bibliotecarios y reivindicaciones

- ¿Cuántos bibliotecarios académicos se necesitan para cambiar una bombilla?
- Sólo cinco. Uno cambia la bombilla mientras los otros cuatro forman un comité y escriben una carta de protesta al Director, porque después de todo, cambiar bombillas ¡NO ES (su) trabajo profesional!

Nuria

(Un comentario en AnecdotarioBurgostecario, gran blog)

miércoles, 28 de octubre de 2009

“Para eso estamos”

En el gimnasio al que voy, suele estar muchas veces por allí un entrenador personal con algún que otro cliente dando una sesión de entrenamiento. Yo siempre he tenido la sensación que eso de tener entrenadores personales es propio de opositores a bombero o policía y de gente de clase alta. Sin embargo, el otro día, charlando con una par de personas del gimnasio, me di cuenta que muchos de ellos habían tenido unas cuantas sesiones con él. Gente de todo tipo: clase media, alta, trabajadora… Algo que me sorprendió aún más cuando vi sus tarifas (no muy económicas, precisamente). Comentando con algunos de ellos cómo les había, ido todos estaban muy satisfechos y no parecía que ninguno se arrepentiera del dinero invertido.

El muchacho trabaja en varios gimnasios y va atendiendo clientes de uno u otro sitio, pero es tal la frecuencia con la que acude al mío que ya es un viejo conocido. Hace un par de días o así, estando el vestuario, entró para cambiarse y entrenar un rato. Un conocido mío está ahora recibiendo un par de sesiones con él y desde que empezó está irreconocible, no para ni un segundo levantando pesas de un lado para otro. Y no es que antes no fuera al gimnasio, pero apenas era capaz de hacer los ejercicios sin que empezara a notar molestias. Se lo comenté al entrenador y me contestó tan tranquilo: “Para eso estamos. Igual que los médicos están para unas cosas, nosotros estamos para otras”. Esto me dio que pensar, sobretodo estando en la época en la que estamos en la que todo el mundo está recortando gastos como loco para llegar bien a fin de mes. El entrenador por su parte, no ha notado mucho bajón con el tema de la crisis y sigue teniendo clientela de sobra.

Haciendo una analogía con nuestra profesión, es casi para echarse a reír. Hace unos meses completé un cuestionario sobre temas relacionados con la profesión y ahí estaban las ya típicas preguntitas: “¿Hay “crisis” dentro de nuestro campo?” y “¿Qué cree que hace falta para ser reconocidos por la sociedad?” Me pregunto si el entrenador personal se plantea si hay crisis dentro de su campo o qué le hace falta para ser reconocido por la sociedad. Lo dudo mucho, él trabaja y trabaja bien, y eso le sobra y le basta para hacerse valer. Cobra una pasta sí, pero los clientes ven un beneficio evidente a su trabajo. Ojalá no nos planteáramos nosotros tanto estas cuestiones y nos centráramos en ver para qué estamos, tal vez así, los demás también lo verían.

lunes, 17 de agosto de 2009

Preparing IFLA 2009

Colgados en su momento los dos primeros números del IFLA Express y ya traducido el que aparecerá el primer día de congreso, ya va tocando prepararse para Milano 2009.

El viernes marchamos para Milán, sábado reunión con el equipo del IFLA Express y Caucus Hispánico, domingo sesión para primerizos. Aunque ya no es la primera vez, puesto que no pude asistir el año pasado intentaré hacerlo este.

Me llama especialmente la atención escuchar a Bob McKee al que ya vi durante una intervención que hizo en la sesión del New Professionals Discussion Group el año pasado y al que ya he hecho referencia alguna vez con respecto a la utilización que hace CILIP de las herramientas de la web social.

sábado, 25 de julio de 2009

Más vale tarde que nunca

Actualización 14/08/2009: Ya está disponible el texto completo de la comunicación aquí.

Con cierto retraso hago una pequeña crónica de la New Professionals Conference. Tuve la oportunidad de conocer a jóvenes profesionales del Reino Unido y escuchar nuevas ideas y otros puntos de vista. Como ya he mencionado otras veces, allí el sistema para ser bibliotecario es distinto, no existe un grado o una licenciatura, sino que se trata de un máster. Por lo que la mayor parte de los profesionales trabajan en una biblioteca antes de estudiar el máster, por lo que vienen de ámbitos muy distintos. Por otra parte, al contrario que en España, la gran mayoría trabajan en bibliotecas universitarias.

Por tanto, las ponencias eran estrictamente bibliotecarias, nada de documentalistas, pero de lo más variopintas. Entre las que más me llamaron la atención, me parecieron especialmente interesantes las siguientes:

  • Katie Hill habló de la Generación Consumista y cómo las bibliotecas deben insertarse en una sociedad donde reina el consumismo alzando las cosas positivas que éste aporta y aprovechándonos de ellas mediante estrategias de marketing, etc.
  • Ned Potter nos advirtió de la importancia de acabar con la imagen que tienen los bibliotecarios realzando los principales estereotipos que nos afectan negativamente.
  • Lydia Mayor habló sobre inclusión social, una de las tareas más importantes que debe realizar la biblioteca y enumeró las minorías más marginadas a las que hay que prestar atención. Realmente interesante.

Si queréis leer más sobre el tema aquí tenéis las crónicas de Lizzie Russell, Kathy Ennis, Jo Alcock (otra de las ponentes, ella habló sobre marketing personal), una de las asistentes (1, 2 y 3) y otra. Jo ha creado un evento en Slideshare donde los ponentes irán colgando sus presentaciones.

jueves, 2 de julio de 2009

Conferencia para Nuevos Profesionales

El próximo lunes 6 de julio se celebrará en la Metropolitan University de Londres el CILIP New Professionals Conference 2009 organizado en colaboración por el Diversity Group y el Career Development Group de CILIP para que nuevos profesionales puedan compartir experiencias e ideas y traer algo de frescura a la  profesión.

Será la primera vez que presente una comunicación y en inglés (WTF!). En mi caso se titulará “New Technologies, New Professionals” y en ella trataré de mostrar la gran cantidad de oportunidades que tenemos los nuevos profesionales de la información de desarrollar nuevos perfiles profesionales haciendo uso de la tecnología y del ingenio. Todo ello lo ilustraré con tres casos reales.

Además, tendré la oportunidad de reencontrarme nuevamente con María Cotera y Dave Percival de los que ya hablé en su momento. Será toda una experiencia para ver cómo están las cosas por allí y qué maquinan los nuevos profesionales en las islas. Vaya, que la cosa promete.

sábado, 6 de junio de 2009

Fesabid 2009 desde el punto de vista de un primerizo

Hace ya más de dos semanas que fue Fesabid 2009 y por fin, como siempre con retraso, por no perder la costumbre, aprovecho para contar un poco cuál fue mi experiencia allí.

Lo mejor. La gente. Fesabid supone una gran oportunidad para reencontrarse con conocidos de la profesión y conocer a gente nueva, para compartir experiencias y ponerse al día.

Lo peor. Como suele ocurrir siempre en estos casos, la falta de tiempo. Siempre se va uno con la sensación de que no ha aprovechado lo suficiente la ocasión, de que ha dejado conversaciones a medias o se ha perdido algunas ponencias interesantes.

En mi caso, nada más llegar asistí al panel de expertos “Creación y gestión de contenidos para una sociedad informada” en la que participaron Pepe Cervera e Ismael Nafría. Sinceramente, Pepe Cervera me defraudó, no aportó nada nuevo y daba la sensación de improvisar sobre la marcha. Al contrario, los proyectos que Ismael Nafría está llevando a cabo con la hemeroteca de La Vanguardia y HagoClic.com me llamaron mucho la atención. En el Boletín Bibliotecario de la BUCM hicieron una interesante crónica de la ponencia.

Acto seguido me fui zumbando a la presentación del Anuario de Bibliotecas Españolas 2009 que confecciona la revista Mi Biblioteca. Allí pude conocer personalmente a Conchi Jiménez y Raúl Cremades, con los que llevo colaborando ya más de un año y que sólo conocía a través de correos electrónicos y llamadas de teléfono.

Por la noche tocó cena bloguera. Fue una ocasión estupenda para reencontrarme con algunos conocidos y conocer en persona a gente que llevo ya mucho tiempo leyendo. Dídac hizo este magnífico vídeo:

El jueves asistí al evento LibraryConnect organizado por Elsevier y luego por la tarde, marché a ver qué tal les iba a los aragoneses en el tema laboral y de las asociaciones. La impresión que me dio fue bastante regular, muchas quejas y pocas iniciativas a excepción de intervención de Jorge Serrano, que demostró que con trabajo y esfuerzo, se pueden conseguir grandes objetivos. No sé yo si convenció a los asistentes, pero me pareció un ejemplo a seguir de éxito profesional. En especial, me llamó la atención cuando afirmó que da igual cómo le llamen a uno, si documentalista, bibliotecario o lo que sea, lo importante es aplicar los conocimientos que tenemos para dar respuestas y soluciones. En CEPYME Aragón, hacen una pequeña crónica.

El viernes les tocó el turno a los bibliometras y asistí al taller “Capacitación de las bibliotecas para asesorar a los investigadores” [pdf] en la que participó entre otros Daniel Torres Salinas y cuya presentación está disponible en el blog de EC3. Me perdí la mesa redonda “Percepciones de la web social entre los profesionales de la información” a la que me hubiera gustado asistir (signo bueno de que había dónde elegir) pero por lo visto fue todo un éxito, algo que me viene de perlas para enterarme de todo lo que se dijo.

Aquí tenéis la recopilación de enlaces que ha elaborado Catorze para Fesabid.

viernes, 1 de mayo de 2009

“Si no tienes trabajo… te lo inventas”

Habiendo descansado ya un poquito de toda la semana y viendo que me va a ser muy difícil escaquearme esta vez, - ya que por dos sitios distintos se me insinúa, - haré una pequeña crónica de lo que fueron las II Jornadas sobre Salidas Profesionales para Titulados en Documentación. Pero antes de nada, agradecerles a los ponentes su dedicación, a los asistentes su entusiasmo y a la facultad su implicación.

Este año fue Adela D’Alòs de doc6, la encargada de abrir el acto con una ponencia titulada “Los profesionales del siglo XXI”, en la que destacaba la importancia de que el profesional de la información tenga una perspectiva global de la organización en la que trabaja, teniendo siempre presentes los objetivos de la organización y haciéndolos propios. El nuevo profesional debe hacerse valer no explicando lo que hace, sino lo que consigue. Además, hacía una diferenciación entre el perfil profesional y el perfil técnico, mencionando de manera más o menos implícita el Principio de Peter y la frustración que puede entrañar guiar tu carrera profesional hacia un perfil que no se adecúa con tus gustos o habilidades.

La mesa redonda “Abriendo caminos en la profesión” fue la más cercana a los alumnos y bastante inspiradora. Álvaro Cabezas nos brindó un genial decálogo para trabajar en tiempos de crisis indicando entre otros, algunos elementos a la hora de lanzarse al mundo laboral:

  • Reputación digital
  • Formación continua
  • Ambición sana
  • Estrategia a medio plazo
  • La especialización
  • Visión de conjunto
  • Hacer lo que a uno le guste

David Gómez nos obsequió con una completísima guía sobre los distintos caminos en los que enfocar la búsqueda de trabajo dependiendo del sector en el que nos queramos ubicar (administración, empresa privada, docencia e investigación y autoempleo). De hecho, fue tan completa que tuvo que abreviar, dejándose cosas en el tintero y haciendo que los organizadores nos planteáramos si habíamos hecho bien en darle sólo media hora o si nos habíamos quedado cortos.

Por su parte, Elisa Legerén puso un poco los pies en la tierra. Poniendo casos basados en su propia experiencia de ejemplo, habló sobre la necesidad de sacrificarse en aras de encontrar un buen puesto de trabajo. De la necesidad de arriesgar y no tener miedo a salir allí donde se le llamara a uno, sin esperar a que le llamen a uno.

Los tres junto con Adela, destacaron la importancia de las redes de contactos. Los puestos de trabajo que se ofertan suelen ser únicamente la punta del iceberg, además, como destacó Álvaro, el 70% de los contratos vienen a través de contactos.

Por la tarde fue el turno de María Cotera, que con su entusiasmo y su entrega, animó a los asistentes a marcharse al extranjero y les contagió su energía destacando la importancia del activismo profesional de cara al desarrollo profesional.

En la segunda mesa redonda participaron Olga Cuadrado, José Navarrete y Rafael Cid y se titulaba “Nuevos perfiles en la administración”. José Navarrete fue el encargado de abrir la veda señalando los cambios paradigmáticos que se están produciendo en la profesión y la discordancia que existe entre los temarios que se exigen en las oposiciones y el trabajo final que se desempeña. Olga Cuadrado encandiló a más de uno mostrando el magnífico trabajo que están desarrollando ella y una compañera en la biblioteca de la Fundación Tres Culturas (por cierto, tienen blog). Finalmente, Rafael Cid nos puso a la última en lo que está trabajando la asociación de cara a conocer el pleno reconocimiento de la profesión por parte de la Administración Pública. Fue una de las mesas más moviditas con un intenso debate sobre el asociacionismo y la importancia de tener una sola voz de cara al avance de la profesión.

Finalmente, el miércoles por la tarde puso fin a las Jornadas Javier Leiva con una conferencia sobre Autoempleo y Nuevas Tecnologías. En ella nos explicó detalladamente los pasos que hay que dar para hacerse autónomo y para montar una empresa. Nos contó su experiencia personal y nos dio una lista y ventajas e inconvenientes. Además, enseñó cómo utilizar la tecnología para conseguir nuestros objetivos diferenciando entre dos tipos: herramientas para difundir y herramientas para producir.

Uff, qué largo me ha quedado esto… Por cierto, las fotos aquí. :-)

martes, 21 de abril de 2009

II Jornadas de Salidas Profesionales para titulados en Documentación

cartelIIJornadas
En la Facultad de Comunicación y Documentación hemos organizado los próximos 28 y 29 de abril las II Jornadas sobre Salidas Profesionales para Titulados en Documentación. Este año el objetivo es combinar entre los ponentes a antiguos alumnos de la Facultad y gente de fuera de Granada con el fin de dar una perspectiva lo más amplia posible del mundo laboral. Además se ha buscado que los profesionales que asistan complementen a los de la edición anterior.
El programa es el siguiente:
Martes 28 de abril:
10.00 – Presentación por parte del decano de la Facultad, Antonio Ruiz Rodríguez
10.30 - EL PROFESIONAL DEL SIGLO XXI Adela D’Alòs (doc6)
11.30 – Mesa redonda: ABRIENDO CAMINOS EN LA PROFESIÓN Álvaro Cabezas (ec3), David Gómez (Observatorio de la Infancia en Andalucía) y Elisa Legerén (2º Premio Nacional de Fin de Carrera de Educación Universitaria)
17.00 – HAZTE BIBLIOTECARIO Y VE EL MUNDO María Cotera (University College London)
18.00 – Mesa redonda: NUEVOS PERFILES EN LA ADMINISTRACIÓN José Navarrete (Universidad de Jaén), Olga Cuadrado (Fundación Tres Culturas) y Rafael Cid (AAPID)
Miércoles 29 de abril:
17.00 – AUTOEMPLEO Y NUEVAS TECNOLOGÍAS Javier Leiva Aguilera (Catorze)
18.00 – Taller de búsqueda de empleo a cargo del Centro de Promoción y Empleo y Prácticas de la Universidad de Granada
¡Les esperamos!

lunes, 9 de febrero de 2009

Profesionales comprometidos (y dos)

Sigo y acabo con esta miniserie.
 Javier es ex compañero de facultad al parecer, aunque nunca coincidí con él. Se fue a Londres hace cinco años y, por la impresión que da, no parece tener mucha prisa en volver. Se marchó allí por evitar las odiosas oposiciones, que son el sino en España y no hay día en el que deje de alegrarse de la decisión que tomó. Además es de las pocas personas que conozco (y digo pocas porque últimamente me he encontrado con varios bichos raros como él) que es bibliotecario de vocación y que no aterrizó, como la mayoría de nosotros, por algún extraño capricho del destino.
Javier es bibliotecario de prisiones. Pero lo más alucinante es que es bibliotecario de prisiones también porque eso era lo que él quería ser. Cuando fue a Londres, decidió trabajar primero como librero antes de pedir trabajo en una biblioteca para coger soltura con el idioma y conocer el tipo de obras que leen los ingleses. Hace dos años se fue a una prisión a las afueras de Londres y está encantado. Su trabajo, como se supondrán es, en cierto modo, muy parecido al de Dave, ya que debe ganarse a gente que no está muy predispuesta a coger un libro y que en algunas ocasiones puede muy bien tratarse de analfabetos. Y es este aspecto social el que más le preocupa y el que le está haciendo plantearse unirse a CILIP como miembro activo. Aún no lo ha hecho, pero ya está empezando a planear cosas en colaboración con el Diversity Group y el Career Development Group.
Es la misma profesiones en ambos casos y sin embargo, poco tiene que ver el medio en el que trabajan Dave o Javier. Tal vez la hostilidad de ambos sea la característica común, pero en cualquier caso eso es lo de menos, es el entusiasmo, las ganas de cambiar una profesión que consideran mejorable, unas condiciones de trabajo y una perspectiva de cómo son las cosas que no concuerda con la suya propia y para ello no se quejan, sino que se manchan las manos y se ponen a trabajar, gastando su tiempo de manera totalmente desinteresada, arropando a los nuevos miembros y ayudando como pueden. Aportando su granito de arena.

lunes, 2 de febrero de 2009

Profesionales comprometidos (uno)

Actualización: ¡Qué desastre! Publiqué el post sin ningún tipo de enlace ni de referencia, muy mal, muy poco dospuntocerista  :-)

Tuve la suerte el pasado lunes de asistir a la recepción presidencial de María Cotera, del Career Development Group de CILIP, que será la primera presidenta no británica del grupo en sus más de 100 años de historia. Allí conocí a gente bastante interesante y también formas de trabajo y formas de ver el asociacionismo y el activismo bastante inspiradoras. De todas estas cosas espero escribir unos cuantos posts, porque resulta bastante complicado condensarlo todo en uno y creo que vale la pena compartirlo.
Creo que alguna vez lo he dicho, a mí las bibliotecas nunca me han llegado a interesar lo suficiente como para plantearme mi desarrollo profesional en esa línea, de hecho, mi experiencia en bibliotecas es nula, siempre que he tenido la oportunidad me he decantado por otras opciones. Sin embargo, citas como ésta invitan a la reflexión, pues te permiten conocer a personas que destilan tal entusiasmo y tanta vitalidad y ganas de trabajar y de cambiar las cosas, que te llenan de optimismo. Algo que, tristemente (aquí va mi opinión, que nadie escandalice) pocas veces se ve en los bibliotecarios, lo común (o la visión que ofrecen, al menos) es el victimismo, la queja constante y la crisis perpetua. Evidentemente, no se vayan a pensar que Spain is different y que los ingleses son tan maravillosos, ni mucho menos, la impresión que tengo es que, en general, discuten las mismas cosas que nosotros y tienen las mismas preocupaciones y, tal vez incluso, la misma actitud.
Voy a presentaros a dos profesionales comprometidos: Dave y Javier. Ambos bibliotecarios y ambos trabajan en sitios muy diferentes, pero su labor es la misma. En este post hablaré del primero y el segundo lo dejaré para otro día.
Dave es bibliotecario público en Portsmouth, allí trabaja con niños huérfanos que viven en familias de acogida. Afirma que solo el 1% de esos niños acabará yendo a la Universidad, al parecer con la crisis, su puesto y el de algunos de sus compañeros corre peligro. Estos niños no son de los que van a la biblioteca a hacer los deberes, como ustedes comprenderán. De modo que Dave se dedica a organizar miles de actividades para motivarlos y para que vayan a las bibliotecas: talleres de cómics, horarios nocturnos con actividades y juegos variados, clubes de lectura en pubs y un largo etcétera.
Dave considera que la biblioteca no tiene que centrarse tanto en los usuarios reales que tiene como en los no usuarios: aquella gente que vive en un ámbito totalmente opuesto a la educación y a la formación, por eso sus clubes de lectura tienen lugar en los pubs y no en la misma biblioteca, porque él no pretende que la gente que lee se junte para hablar de sus libros, sino que sea la gente que no lee normalmente, que son a fin de cuentas los que la biblioteca tiene que educar y formar.
A Dave lo conocí el pasado verano en Québec, también era la primera vez que él asistía al evento, y al parecer quedó bastante desencantado. La imagen que tenía de la IFLA no se correspondía en absoluto con la realidad. Entonces hizo algo muy típico en nuestra profesión: se quejó hasta la saciedad. Pero al contrario de lo que suele ocurrir, una vez se quedó con la boca seca de tanto quejarse, decidió actuar e intentar poner su granito de arena para que estas asociaciones (CILIP e IFLA) se parecieran más a lo que él había imaginado. Desde entonces se ha asociado a CILIP y es miembro activo del Public Libraries Group y especialmente, del Diversity Group, está organizando unas jornadas para junio de este año en colaboración con el Career Development Group para nuevos profesionales, escribiendo una comunicación para IFLA y otras muchas actividades resaltando el aspecto social de la profesión, que para la suya es esencial y que considera que no se tiene prácticamente en cuenta en las asociaciones profesionales.

miércoles, 29 de octubre de 2008

Aún nos estamos reinventando

Hace unas semanas escribí un post titulado "10 razones para ser bibliotecario", donde traducía, o más bien parafraseaba, este otro post de 2006 que escribió una bibliotecaria estadounidense. Como consecuencia de ello, Verónica Juárez Campos, una profesional mexicana, aprovechaba para reflexionar sobre estas razones desde su punto de vista, haciendo algunas apreciaciones bastante interesantes. Unos días después, Loida García-Febo, bibliotecaria de la Queens Library, Nueva York, me escribió mostrándome su interés por el post y mandándome una serie de preguntas para que reflexionara sobre aspectos generales de la profesión, para luego hablar sobre las similitudes entre profesionales estadounidenses y españoles.

Leyendo los tres posts, uno se da cuenta de que estas similitudes no sólo se dan entre España y Estados Unidos, sino también con México. Las diferencias son mínimas y la concepción que los bibliotecarios tienen de sí mismos y de su profesión es prácticamente idéntica. Los inconvenientes y las ventajas son muy parecidos y estamos más o menos, en el mismo punto. Es más, vamos en la misma línea de cara a la superación de los problemas que afronta la profesión. Es importante señalarlo porque muchas veces no somos conscientes de ello y creemos que esa "crisis de identidad" que vive la profesión es un problema local, recriminándonos en algún caso la forma de actuar y entrando en cuestiones puntuales que no son realmente trascendentes. Cada cierto tiempo aparecen en Iwetel discusiones ya clásicas sobre la importancia del título universitario, el ocaso de los estudios de ByD o la necesidad de asociaciones fuertes y colegios profesionales. Evidentemente, habrá cuestiones que sean locales y que puedan solventarse con un poco de consenso entre los profesionales, pero otras son parte de un problema más grande (¿realmente es un problema?) que es la juventud de los estudios y de la ciencia como tal, y la revolución que ha supuesto Internet. Revolución que aún no ha sido digerida.

Lo que pretendía cuando publiqué ese primer post era cambiar un poco el tono siempre pesimista y negativo que muchas veces se transmite cuando se tratan todas estas cuestiones. Ser bibliotecario tampoco es tan malo.

Y es que a veces es mejor ver el vaso medio lleno y no medio vacío.

lunes, 13 de octubre de 2008

10 razones para ser bibliotecario

En plena crisis existencial, acabando la carrera y con la cabeza echa un lío, he descubierto un post muy inspirador que data del 2006 en el que Martha J. Spear expone en su blog diez razones para ser bibliotecario. Lo mejor de todo es de dónde surge la idea de escribir estas razones. Martha, que al parecer trabaja mucho con jóvenes, está charlando con una de sus estudiantes más avezadas y le pregunta qué se plantea estudiar en el futuro. Ésta le responde que se está planteando hacer un máster de Museología. Martha le indica que eso es muy parecido al MLIS (Master on Library and Information Science). "¡Oh, qué va! Nunca estudiaría eso", le responde la estudiante.

¿Por qué tiene tan mala prensa nuestra profesión? Se pregunta Martha, con tantas buenas razones como hay para estudiarla...

Aquí os las dejo a ver qué otras razones se os ocurren.

1. Cambiante y renovadora

Se trata de una profesión que ofrece retos constantes, tanto por la rápida evolución de la misma (sobretodo ahora, cuando los cambios tecnológicos son cada vez mayores), como por la gran variedad de sectores en los que se puede trabajar: bibliotecas de hospital, de prisiones, escolares, públicas, universitarias...

2. Romántica

Está en un contacto constante con el público, permite relacionarse con la gente y siempre en un ámbito tan cándido como es rodeado de libros.

3. Habilidades útiles

Se aprenden cosas útiles. Se adquieren habilidades que nos permiten desarrollarnos no solamente en el ámbito laboral sino también en nuestra vida cotidiana. Aprendemos a gestionar, a aprovechar los recursos disponibles, a ser ordenados y metódicos, a organizar....

4. Congresos increíbles

Los bibliotecarios se lo montan realmente bien, reconozcámoslo. No sé, aquí en España siempre que alguien habla de colegiarse o asociarse aparecen voces muy críticas. Vamos a ver, un poquito de por favor, ¿han ido alguna vez a algún macrocongreso de bibliotecarios? ¿Se han paseado por la página de la IFLA a ver donde han sido, son y serán los próximos congresos? Yo sí, y la verdad es que nada más que por hacer turismo ya vale la pena. Ya fui una vez y no tendría ningún problema en repetir. Según dice Martha, los americanos también se lo montan de lujo.

5. Vacaciones

No sé cómo funciona aquí la cosa, pero al parecer los bibliotecarios estadounidenses no sufren de estrés por el tema de las vacaciones.

6. Un trabajo de futuro

Ningún niño sueña de mayor con ser bibliotecario. Pero el hecho de que se trate de una profesión tan transversal y con un perfil tan poco definido, hace que los bibliotecarios se conviertan en profesionales muy versátiles, capaces de realizar múltiples tareas de diferente naturaleza.

7. Paga el alquiler

Nadie se mete a bibliotecario para hacerse rico, pero tampoco se malvive. De todas formas, el dinero no es lo más importante.

8. Buenas condiciones laborales

Esta razón es más para los jóvenes que aún guardamos en nuestra cabeza recuerdos de otros trabajos sin cualificación en los que uno muchas veces no tiene la suerte de trabajar sentado.

9. Compañeros de trabajo enrollados

Por el perfil, se trata de personas con inquietudes intelectuales, con cierta cultura y que intentan innovar constantemente, por lo que acabas conociendo a gente muy interesante.

10. Un gran objetivo

Tal vez no vayamos a salvar al mundo, pero el hecho de que nuestra máxima sea una cultura libre para todos, ya se convierte en un gran reto. Hay bibliotecas en todo el mundo, en los sitios más remotos y en las universidades más prestigiosas, nuestra labor es importante a todos los niveles. Lo siento Google, pero el mundo aún necesita bibliotecarios.

miércoles, 11 de junio de 2008

ByD ¿Ciencia o profesión?

Estoy todavía liado con el libro de Emilio (sí, todavía, lo sé, soy un desastre) y leyéndolo uno, - que ya le falta poco para acabar la carrera, - se pregunta si tanta monserga como se da en la carrera sobre lo importante que es investigar sirve realmente para algo. Sí, hoy estoy algo trascendental, lo reconozco, debe ser que la victoria de la selección me ha afectado especialmente.

El caso es que más de una vez me he quejado de los pocos conocimientos de informática que adquirimos en la carrera y de que se nos están echando encima las tecnologías. De hecho ya nos dieron un toque las empresas hace casi dos años. Todo el mundo está más que concienciado en que hace falta un cambio, pero ¿hacia dónde?

¿Biblioteconomía-y-Documentación o Biblioteconomía y Documentación?

En primer lugar, aclaremos de una vez y por todas a poder ser, de qué estamos hablando. ¿De la ByD? ¿De la Biblioteconomía sólo? ¿Tal vez de la Documentación? A ver si nos enteramos un poco porque claro, estamos juntando aquí a un colectivo enorme y a la vez enormemente heterogéneo. No estoy nombrando la Archivística (aunque creo que debería estar) por no echar más leña al fuego.

Para ello vamos a ver qué dicen los estadounidenses que son, a fin de cuentas, quienes parten el bacalao. Y primer problema, ellos hace ya más de 50 años que dejaron la palabra documentación de lado y se pasaron a Ciencia (en singular) de la Información. Según la Wikipedia (vamos a ser dospuntoceristas y algo cutres en esto de las fuentes) Biblioteconomía (Library Science) es:

Una ciencia interdisciplinar que incorpora las Humanidades, el Derecho y Ciencias Aplicadas en relación con el estudio de la biblioteca, la colección, la organización, preservación y difusión de recursos de información, y Economía de la Información. Por razones históricas, la Biblioteconomía también incluye a la Archivística.

Bueno, para empezar hay cosas que ya de partida no casan con la formación que tengo pero bueno, eso es otro tema. Seguimos con la Documentación (Information Science):

Ciencia de la Información (también Estudios de la Información) es una ciencia interdisciplinar que estudia temas relacionados con la colección, la clasificación, manipulación, almacenamiento, recuperación y difusión de la información.

Parece que la única diferencia a grandes rasgos es que el objeto de estudio. En un caso es la biblioteca y en otro la información. Esto debería de suponer dos líneas de investigación muy claras y evidentes que, aunque con límites algo difusos, se complementan. Y de hecho es así, si seguimos fijándonos en los americanos vemos que la diferencia en más clara aún. Allí hay dos asociaciones: ASIS&T y ALA. Cada una dedicada a cada disciplina y cada una siguiendo su propia política.

¿Ciencia o profesión?

Pues ciencia y profesión. Así parece que funciona la cosa, al menos en Estados Unidos. ASIS&T tiene una orientación claramente investigadora y ALA está centrada en la profesión. Es curioso que la Biblioteconomía y la Documentación se definen como ciencias, sobretodo en lo referente a la Biblioteconomía. De hecho, la definición que se da resulta bastante coherente, pero no creo que tenga mucho que ver con la formación que se da al respecto. Se enseñan técnicas y modelos de trabajo, nada de ciencia. La ciencia se deja para la Documentación. Pero no por ello debe ser peor la formación, ¿es que acaso se práctica buena ciencia en la Biblioteconomía? Estudios de caso, que yo sepa. Se aplican técnicas y modelos desarrollados fuera del ámbito bibliotecario (como la Biblioteca 2.0, por ejemplo). Esto no es malo, es un hecho.

Y es que no se puede seguir hablando de ByD cuando nos referimos a cosas diferentes porque creamos confusión.

jueves, 15 de mayo de 2008

Entrevista a Keith Michaels Fiels, director ejecutivo de la ALA en Mi Biblioteca

He querido esperarme hasta tener la revista en casa y una vez la recibí no he tenido tiempo para escribir la entrada. Pero ya, al fin, me pongo a ello. En el último número de la revista Mi Biblioteca aparece la entrevista que tuve el honor de hacer a Keith Michaels Fiels (con entrada en la Wikipedia y todo, ojo al dato) aprovechando su visita a Granada, allá por el mes de febrero, con motivo de una reunión del MLAS de IFLA que se celebró aquí. Tratamos temas como la irrupción de las nuevas tecnologías en las bibliotecas, el concepto de biblioteca, el papel del bibliotecario dentro de la sociedad, el papel de las asociaciones profesionales y, cómo no, qué está haciendo la ALA en Estados Unidos.

En lo referente a las nuevas tecnologías me quedo con su contestación cuando le pregunté acerca de aquellas voces críticas que han surgido a raíz de la Biblioteca 2.0:

Mi opinión es que las bibliotecas siguen haciendo lo que hacían hace cien años, la única diferencia es que se le han ido añadiendo tareas y servicios.

Una observación clara y concisa que expone una visión abierta hacia la sociedad y no excluyente, algo que ejemplifica sin duda alguna el aumento de usuarios de bibliotecas que está habiendo en Estados Unidos tal y como señalaba.

También tocó un tema que hemos tocado aquí muchas veces, el de la formación. Resaltando la importancia de las asociaciones que acreditan a las escuelas universitarias, no sólo dándoles así un estatus a las escuelas en cuestión, sino manteniendo una cierta uniformidad en cuanto a la calidad de la enseñanza de los futuros profesionales. Relacionado también con las asociaciones profesionales intenté atacarle sutilmente pidiéndole razones por las que un profesional deba asociarse. De entre todo lo que argumentó aquí os dejo una frase bien tajante y refleja claramente una de las dos caras del debate asociación sí o no.

[...], hacerse miembro de una asociación es la diferencia entre alguien que tiene un trabajo y alguien que tiene una carrera profesional e interés en seguir creciendo y mantenerse al día. Nunca criticaría a quien no se asocia, pero si eres miembro, simplemente por definición, vas a conseguir puestos más interesantes y una trayectoria profesional más notable.

En fin, si les pica la curiosidad y quieren seguir leyendo, ya saben, a leer Mi Biblioteca :).

viernes, 11 de abril de 2008

Planteándonos el cambio... a mejor

Cada vez falta menos para la implantación de los nuevos planes de estudios de acuerdo con el Plan Bolonia y se empieza a notar en la Facultad. Algún que otro profesor se acerca preguntando qué tal nos parecería dar tal o cuál cosa en la carrera o qué opinamos sobre tal o cuál asignatura. Se trata de algo que ya no me tocará a mí, pero que indudablemente nos llama bastante la atención y sobretodo porque el que se nos pida opinión (independientemente de si se nos hace caso al final o no) nos hace sentirnos partícipes del cambio. En el número de ARIST del año pasado dedican el primer capítulo a la Historia de las Ciencias de la Información. En él tratan cuestiones tales como la identidad de la profesión, el estatus o la formación (entre otras muchas cosas) y sirve a modo de reflexión al hilo del cambio en los planes de estudios.

En primer lugar distingue claramente dos disciplinas y, por tanto, deja entrever la existencia de una tercera:

  • Ciencias de la Información. Son las sucesoras de la antigua Documentación (¿les suena de algo? en el capítulo se refiere a los documentalistas como aquellos que trabajaban en lo que acabo siendo Ciencias de la Información allá por los años treinta. Ahora entiendo la sorpresa de aquel americano cuando le nombré el término). El eje central del capítulo.
  • Biblioteconomía. O como se le quiera llamar, ya saben que ahora resulta ser un nombre poco comercial. Se distingue de la anterior en su carácter menos científico y más profesional.
  • Archivística. Es la innombrable, la que siempre nos dejamos en el tintero, pero que sin duda alguna debe tener cabida en los planes de estudios.

A mi modo de ver se trata de tres ramas o de tres disciplinas estrechamente vinculadas y que, aunque algunas han sido excluidas del nombre de la titulación, deben estar presentes. Pero deben estar presentes con ligeros matices. Una de las quejas más comunes que hay entre los alumnos es que no llegamos a enterarnos de qué va el tema hasta que ya llevamos tres o cuatro años. Hay un popurrí de asignaturas que tocan todos los palos pero no se centran en ninguno provocando desconcierto entre los alumnos que llegamos a preguntarnos si realmente sirven para algo algunas de las asignaturas que se nos imparten. Creo que la manera de solventarlo es orientando la titulación hacia algún aspecto, en uno u otro sentido. Al igual que en su momento la Facultad de la UGR era conocida por tener un corte tecnológico o la Facultad de la USAL por su corte más archivístico. Una titulación que englobe tres disciplinas o no sirve o es extremadamente larga, por lo que hay que centrarse. Esto favorecerá la formación del alumnado y además servirá para otorgarle cierta personalidad y coherencia a la Facultad.

Por otra parte, habrá que hacer frente a ciertas carencias que tiene la disciplina y que históricamente han supuesto un lastre para la profesión y que han impedido darle cierta unidad:

  • Falta de sustento teórico.
  • Ausencia de un perfil profesional evidente.

Y de un nuevo problema que cada vez se hace más evidente en las aulas: el rápido desarrollo tecnológico. Es necesario que los cambios que se hagan permitan cierta flexibilidad a parte de un esfuerzo por parte del profesorado para mantener actualizado su temario (la web 2.0 no existe en las aulas, por ejemplo). Pero no sólo es necesaria la actualización tecnológica, sino en aquellas cuestiones que se ven afectadas directa o indirectamente: propiedad intelectual, historia de las políticas sobre información adoptadas por los distintos gobiernos a lo largo de la historia, el crecimiento de la industria de la información, economía de la información, etc.

Además, en el capítulo del ARIST, Colin Burke incide en la necesidad de investigar y ahondar sobre la historia de los perfiles de los profesionales de la información y de sus carreras. Investigar sobre los planes de estudios seguidos, los empleos que han encontrado, las demandas del mercado, con el fin de establecer una base empírica para plantearnos las necesidades formativas que tienen y que requiere la sociedad. Se trata de responder (traducido literalmente) a las siguientes preguntas: ¿Cuáles fue el nivel mínimo exigido a los estudiantes? ¿Cuál era la situación económica y social de los alumnos? ¿Qué tipo de trabajos encontraron después de completar su formación?